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Eduardo Solá vuelve de Italia, más precisamente de Civitanova Marche tras defender el arco del Club Civitanovese, en el que jugó desde septiembre de 2018. Esta fue su primer experiencia en el exterior: "No se si será la última, si tengo otra posibilidad que me atraiga volvería. Pero jugar para ese club me sirvió mucho para crecer en lo personal y en lo futbolístico. Además aprendí otro idioma y cultura, me gusta mucho".
Eduardo, o como muchos lo llaman "Edu", remarcó que la mayor diferencia entre Italia y Argentina está en la situación estructural de los clubes en general, y que "al ser un país que está mejor económicamente, se refleja mucho a nivel institucional, en materiales de trabajo, canchas, recursos en general".
El defensor de los tres palos, forma parte del Club Atlético Timbuense y, por ende, de la Liga Regional Ssnlorencina De Fútbol. El arquero llegó a la ciudad con altas expectativas luego de un año sin actividad debido a la pandemia. "En cuanto a lo personal espero volver al ruedo de la mejor manera. Ahora, si hablamos del objetivo grupal es pelear el campeonato de la liga, sabemos que el equipo cuenta con una calidad muy buena de jugadores y apuntamos a eso", confesó el arquero.
En cuanto al año sin actividad, es de esperar que retomarlas se convierta en algo duro para nuestros jugadores pero Solá afirma que no le está está costando demasiado volver a la actividad, ya que siempre se mantuvo mínimamente entrenando en casa al inicio de la cuarentena y cuando reabrieron los gimnasios también ahí. Luego agregó: "En cuanto a lo físico me siento bien, sólo tengo que sumar minutos de partido y entrenamiento para volver al mejor nivel en lo técnico y futbolístico".
Para concluir, el joven recordó sus inicios en el deporte: "Al fútbol empecé a jugar a los 3 años, desde que tengo uso de razón, pero era jugador de campo. Comencé a atajar a los 11 años, me sentía más cómodo en el arco y lo hacía bien. Mi primer partido en el club que jugaba atajé porque faltó el arquero titular, quise hacerlo y salvé el partido, desde ahí ya me quedé con el puesto, no pude dejarlo nunca más".
Autora: Mailén Novicci.
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